Mucho se está hablando últimamente, sobre todo en nuestro país, acerca de los derechos y obligaciones en cuanto a la conciliación existente entre la vida laboral y la vida familiar. Si ya nos ponemos a comentar sobre lo que esto mismo supone cuando nos referimos al nacimiento de un hijo, la brecha aun es mayor.
La desigualdad de género que existe en el mercado laboral es un aspecto a tomarse muy en serio, y parece ser que la Unión Europea ha querido salir al paso de las medidas populistas que se estaban promoviendo desde ciertos grupos europeos. La norma hasta ahora tenía unos tintes muy desiguales entre hombre y mujer, padre y madre, en definitiva, en lo relativo a permisos de baja, ante una situación tan feliz como es la llegada de un nuevo miembro a la unidad familiar.
Parece ser que, por fin, se ha puesto un poco de sensatez y sentido común en este aspecto, alcanzando, todas las autoridades laborales habilitadas para estos temas, un acuerdo por el cual se va permitir que todos los progenitores tengan cuatro meses de permiso parental, de los cuales dos deberán ser intransferibles y remunerados. No quedando este cambio tan sólo ahí, sino que del mismo modo las empresas brindarán 10 días a sus empleados en las fechas en las que nazcan sus hijos.
Esta magnífica noticia no ha supuesto cambio alguno en países como Bélgica, Suecia o Noruega, países donde ya se disfrutan de este aspecto, mientras que en otro grupo de países miembros de la Unión europea no era así. La noticia, supone el cierre parcial de la enorme grieta existente en el mercado laboral entre hombre y mujer.
La directriz, tendrá efecto total en los próximos 2/3 años, y también influirá de forma directa a los padres que tengan hijos de hasta 8 años, o personas con familiares con algún tipo de dependencia, pudiendo solicitar bien una reducción de jornada, bien una compatibilidad con la conciliación familiar o bien con el citado cuidado de familiares con esa carga social.
Aunque este es un gran paso, no todos los países van a adoptar estas medidas de manera literal, con lo que no supondrá un gran cambio o avance social en su mercado laboral.
En el caso de España, ya en 2018 se amplió de 4 a 5 semanas de permiso de paternidad, pero para que se pueda alcanzar una subida de hasta 8 semanas, dependerá de que se aprueben los Presupuestos Generales del Estado, pero esa es otra historia.